“Un día en un aula de infantil”
Suena el timbre. Entran en “semi fila” porque se despistan, se sueltan, algunos se vuelven hacia la puerta porque no quieren entrar…..Tiras de ellos hasta el aula mientras que alguna mochila se pierde por el camino.
Llegas al aula. Quitas la mayoría de los abrigos porque ellos solos no son capaces ya que encima del chaquetón llevan envuelta una gran bufanda además de gorrito y guantes, que hay que guardar en las bolsitas de cada uno con cuidado no vaya ser que se pierdan y la madre te lo pida a la salida.
Tratas de poner orden para que comience la asamblea. Te tropiezas con una merienda que alguno ha perdido. Algunos corren por el aula. Uno se sienta en la silla. No lo consigues. Levantas la voz. Ni caso. Recurres a un golpe de silbato o tambor. Las 9 y 20 y ¡por fin se han sentado todos!. Hacemos la asamblea repitiendo más de 20 veces que para hablar hay que levantar la mano y respetar el turno. En mitad de la asamblea, 4 niños se levantan porque quieren “hacer caca”. Según van acabando hay que limpiarles el culito porque no saben y se llenan ropa, manos, WC …
Empezamos el trabajo por rincones , unos le quitan el material a otro compañero… Gritos, llantos y agresiones. Trato de mantener mi calma.¡No se pinta la ficha del compañero!. No se borra con saliva. El cuaderno no se come. El lápiz no se chupa. No se pinta en la mesa. Limpio mocos, limpio mocos, limpio mocos…..
Se acabó!! Pido que recojan el material y lo guarden en su sitio. La mayoría sigue a lo suyo. Desesperada toco el silbato o tambor y termino gritando: A GURDAR Y A ORDENAR CADA COSA EN SU LUGAR…. al tiempo que yo misma voy recogiendo plastilina, piezas y bolas que me voy encontrando por el suelo.
Hora del almuerzo….: pongo un babero tras otro. No me gusta la manzana. Plato volcado y todo derramado. Comida tirada y pisoteada por el suelo. Me duele la barriga…. No quiero más…. Me quiero ir con mamá…. Seño, pélame el plátano. Leo se ha quedado dormido sobre el plato. Limpio mocos, limpio mocos …
Anda…. Juan ha vomitado, desviste, baña, viste.
Hora de la siesta!!! …. Momento manualidades … hay que hacer el cartel de mañana, recorta, pinta, colorea ¡¡no me da tiempo!! … tengo que comer … parece que tiene fiebre, voy a llamar s su madre.
Hora de la merienda. Seño, ábreme el zumo. No me gusta la manzana. A Juan se le ha caído el batido por la mesa. Y la dichosa magdalena desmigada y pisoteada por el suelo. A mí no me gusta, seño. Me duele la barriga. No quiero más. Estoy cansado. Lloros. Me quiero ir con mamá. Seño, pélame el plátano.
Hora de la salida. Pon abrigo, Abrocha abrigos, pon gorritos y bufandas. Tengo pipí, seño…
Padres, madre y abuelitos agolpados en la puerta para que su hijo salga el primero. No encuentro mi mochila, seño. No está mi abrigo. la madre que me pide explicaciones del porqué su hijo tiene un bocado … . Otra mamá preocupada porque su hijo no ha bebido suficiente agua. Una bufanda que no aparece. Un guante perdido, una muda sin dueño desde la semana pasada, una botella de agua que no es suya…. A Luis no le viene nadie a recoger. Abro su mochila. No tiene ningún aviso del retraso. Estoy cansada. Llamo a sus papás: “enseguida llegamos”
Llego a casa con la coleta al lado, la boca seca porque no tuve tiempo de beber agua , las uñas llenas de plastilina y la ropa llena de pintura y restos de comida. No puedo tirar de mi cuerpo.
Una vecina en el ascensor…..
“¡Qué, ¿¿ ya has acabado el trabajo! ??
¡Qué bien vivís los maestros!”
…..
FELICIDADES MAESTROS/AS POR VUESTRO GRAN TRABAJO Y ESFUERZO DIARIO !!